Hace unos días, la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), en colaboración con CAF, dio a conocer el informe titulado "Capacidades Financieras de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas". Este estudio, el primero en su tipo en Chile, evalúa la alfabetización financiera de las MIPYME y se llevó a cabo entre marzo y mayo de 2024, con una muestra de 307 gestores.
En este documento se analiza los conocimientos, comportamientos y actitudes financieras de las MiPyME en Chile, identificando las fortalezas y desafíos en su gestión financiera, promoviendo políticas y programas que mejoren su sostenibilidad e inclusión financiera en las organizaciones a nivel nacional.
Entre sus resultados, hay cifras de gran interés relacionadas con la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) de las MiPyME en Chile. Una de ellas es que el 71% muestra un compromiso con el impacto que sus decisiones directas de inversión puedan tener sobre el medioambiente o sociedad y que este interés aumenta cuando son gestionadas por mujeres (80%).
Para poder explicar este fenómeno, Pablo Sánchez Trullenque, Gerente General de Logros Servicios Financieros, organización originaria de Talca que, durante más de 3 décadas ha jugado un rol fundamental en el crecimiento de más de 25 mil Pymes a lo largo de todo el país, explica que “las innovaciones tecnológicas están impulsando un crecimiento robusto en el sector de energías renovables, con una creciente participación de tecnologías limpias en la matriz energética global”.
“En el escenario actual, resulta fundamental la creación de Instrumentos Financieros Innovadores, por ejemplo, los híbridos, es decir, que combinen créditos verdes con seguros ambientales o bonos de impacto social podría mitigar riesgos y atraer a más inversionistas”, agrega el experto.
Según enfatiza el profesional “el monitoreo y evaluación continua también es vital. “Implementar sistemas de seguimiento continuo para evaluar el desempeño de los proyectos financiados y ajustar condiciones según sea necesario”.
“El Crédito Verde es un instrumento financiero diseñado para promover la sostenibilidad ambiental mediante el financiamiento de proyectos que contribuyan a la mitigación del cambio climático, la protección del medio ambiente y la eficiencia energética. Este tipo de crédito está regulado por un marco específico que asegura que los recursos se destinen a iniciativas con un impacto ambiental positivo”, agrega.
Además, según explica el gerente general de Logros este enfoque genera importantes implicaciones:
● Oportunidad de Mercado: Las empresas de servicios financieros pueden expandir su cartera de productos al incluir créditos verdes, atrayendo a clientes interesados en financiar proyectos sostenibles.
● Reputación Corporativa: Participar en la promoción y financiamiento de iniciativas sostenibles contribuye a mejorar la imagen corporativa, alineándose con las expectativas de responsabilidad social empresarial (RSE).
Mujeres al mando
En relación al interés de las mujeres por su disposición en hacer crecer sus empresas con RSE, el experto proyecta que “las empresas gestionadas por mujeres podrían tener una mayor tendencia a invertir directamente en créditos verdes que impacten positivamente al medioambiente o la sociedad debido a varios factores”.
Para entender el panorama completo, el Gerente General de Logros Servicios Financieros, comparte estos factores:
• Sensibilidad hacia la sostenibilidad: Estudios sugieren que las líderes mujeres tienden a priorizar prácticas empresariales sostenibles y responsables, y están más dispuestas a tomar decisiones que integren objetivos económicos con impactos sociales y ambientales positivos.
• Mayor orientación hacia stakeholders: Muchas mujeres en roles de liderazgo muestran un enfoque más amplio hacia las partes interesadas, como comunidades, clientes y el medioambiente, en lugar de enfocarse únicamente en los accionistas.
• Perspectivas inclusivas: Las mujeres líderes pueden aportar perspectivas diversas que incluyen la búsqueda de equilibrio entre el crecimiento económico y la justicia social o ambiental.
• Estudios previos: Investigaciones han demostrado que las empresas con liderazgo femenino tienen una mayor probabilidad de implementar estrategias de Responsabilidad Social Corporativa (RSC), incluidas aquellas que abordan la sostenibilidad ambiental.
Proyecciones del interés de productos financieros “verdes”
En relación a las proyecciones, Pablo Sánchez comparte las siguientes:
-Crecimiento de Capacidad: Se espera que la capacidad instalada de energías renovables continúe creciendo a una tasa anual del 10-12%, con una creciente adopción de tecnologías emergentes y soluciones de almacenamiento. El crédito verde establece condiciones preferenciales, como tasas de interés reducidas y plazos de pago extendidos. Sin embargo, estos beneficios también vienen con desafíos:
-Evaluación de Riesgos: Los proyectos sostenibles pueden tener un perfil de riesgo diferente al de los proyectos tradicionales. Es crucial desarrollar modelos de evaluación de riesgo específicos que consideren factores como el retorno de inversión a largo plazo y la estabilidad del marco regulatorio.
-Rentabilidad a largo plazo: Aunque las tasas de interés son bajas, la rentabilidad a largo plazo puede depender en gran medida del éxito del proyecto en términos de sostenibilidad y adaptación al cambio climático.
En relación a cómo Logros, empresa financiera está adaptando sus productos, servicios y asesorías para que estén alineados a este interés en invertir en productos verdes por parte de las empresas, el experto indica “por ejemplo, con la Diversificación del Portafolio de Inversiones: Las instituciones financieras pueden diversificar su portafolio al incluir proyectos de distintas áreas de sostenibilidad, lo que reduce riesgos al no concentrarse en un solo tipo de proyecto”.
También es vital la generación de alianzas estratégicas. “Colaborar con empresas especializadas en energías renovables o gestión hídrica puede facilitar el acceso a proyectos más robustos y con mayor impacto”, puntualiza.
Este tipo de créditos, según indica el especialista, se orienta a financiar proyectos que promuevan la sostenibilidad y reduzcan el impacto ambiental. Algunos ejemplos típicos de proyectos que podrían ser financiados bajo un esquema de Créditos Verdes incluyen:
Proyectos de eficiencia energética: Mejoras en la infraestructura para reducir el consumo de energía, como la instalación de sistemas de iluminación LED, la modernización de sistemas de calefacción o refrigeración, o la implementación de tecnologías de energía renovable.
Movilidad sostenible: Adquisición de vehículos eléctricos o híbridos para flotas de transporte, la instalación de estaciones de carga para vehículos eléctricos, y el desarrollo de infraestructura para el transporte público sostenible.
Gestión del agua: Proyectos de tratamiento de aguas residuales, sistemas de riego eficientes, o la construcción de infraestructura para la recolección y reutilización de agua de lluvia.
Construcción sostenible: Edificios diseñados con certificaciones de sostenibilidad, que utilizan materiales ecológicos y tecnologías que reducen el consumo energético y las emisiones de carbono.
Proyectos de economía circular: Iniciativas para el reciclaje y la reutilización de materiales, la reducción de residuos industriales, o el desarrollo de productos con menor impacto ambiental.