Fue detectado gracias a la investigación epidemiológica, el seguimiento de contactos y el muestreo en establecimientos con riesgo potencial, acciones que se han llevado a cabo tras el primer caso reportado el 31 de diciembre de 2024 en la región Metropolitana.
Esta detección, activó los protocolos correspondientes para contener el riesgo de contagio y dispersión de la enfermedad, lo que incluye la cuarentena total del predio afectado, con una prohibición estricta del ingreso y salida de équidos para evitar la propagación de esta enfermedad.
La detección en diciembre de 2024 en Melipilla, región Metropolitana, generó una investigación epidemiológica en las regiones de Maule, Biobío y Ñuble, debido a la sospecha de contacto con caballares afectados en la región Metropolitana.
A la fecha, el Servicio Agrícola y Ganadero ha confirmado casos en predios de la comuna de Parral, región del Maule, en la región del Biobío y ahora en un predio en Ñuble.
Además de la cuarentena total del predio afectado, las medidas epidemiológicas incluyen el sacrificio sanitario del animal infectado, ya que la enfermedad no tiene tratamiento ni cura, además de constituirse en reservorio de nuevos contagios.
Instalada la cuarentena, se inicia la vigilancia clínica y serológica de los équidos restantes para descartar nuevos casos. El SAG continúa con la investigación epidemiológica para identificar la vía de ingreso de la enfermedad y evaluar su posible propagación a otros establecimientos, mediante el rastreo de contactos, con el fin de detectar, contener y erradicar eventuales nuevos casos.
Ante este brote de anemia infecciosa equina, el SAG realizó un llamado a las y los productores/as tenedores de equinos a mantener las medidas básicas de bioseguridad en sus establecimientos, lo que incluye desinfección de equipos como freno, bocado, endoscopios, herramientas de herraje, etc., antes del uso en otro equino. Utilizar de forma individual agujas y jeringas en el tratamiento de los animales y la limpieza, desinfección y desinsectación de los corrales de forma permanente. Adicionalmente, se llama a las personas dueñas de équidos, veterinarios y trabajadores de establecimientos con équidos, a estar alertas ante síntomas de fiebre, anemia e hinchazón en las extremidades de los animales. Estos síntomas, pueden ser indicadores de anemia infecciosa equina, por lo que, ante la presencia de animales con estos indicadores, se debe dar aviso al Servicio Agrícola y Ganadero, a través de sus oficinas en San Carlos, Bulnes y Chillán, al teléfono 22 3451100 o a través de correo electrónico a oficina.informaciones@sag.gob.cl