Después de la tormenta siempre viene la calma. El conocido refrán se hizo realidad en la cuarta etapa del Rally Dakar, puesto que, tras una accidentada jornada de ayer, los pilotos pudieron disfrutar de un día de competencia más tranquilo, pero no por eso menos exigente.
Y en esa batalla, Patricio Cabrera quedó muy satisfecho con su cometido, puesto que no sufrió grandes problemas y logró escalar en la general de la categoría Rally 2, instalándose por primera vez este año entre los 30 mejores de su serie.
El piloto chileno que compite con el equipo Rieju completó los 425 km de especial en el 28° lugar, tras un tiempo de 6:01’59’’. Con esto, el oriundo de Coyhaique subió seis peldaños y se instaló en la 26° posición, a 4:35'30'' del líder, el italiano Paolo Lucci. Si se considera la general completa del Dakar, con los pilotos de la categoría Rally GP, Cabrera marcha en el 49° lugar.
“Fue una etapa larga. Partimos con mucho frío en la mañana, pero entramos en calor rápido, ya que íbamos sobre dunas todo el tiempo. Me sentí súper bien todo el día, a buen ritmo y solo tuve un problema llegando a la mitad de la especial, ya que parece que en un golpe se desconectaron los acoples rápidos del combustible, por lo que me tocó desarmar y volver a conectar y así llegar bien. Estamos sanos, avanzando y disfrutando de la aventura que está siendo este Dakar; en los últimos años se había perdido un poco eso de la aventura y ahora volvió así es que bien, listos para mañana”, comentó Patricio Cabrera al llegar al campamento base en Ha’il.
Para mañana, la Etapa 5 nuevamente hará un bucle en Ha’íl. Se mantendrá la ruta por caminos de arena, primero por zonas más cerradas y posteriormente por campos abiertos con arena blanda que puede complicar a los pilotos. El tramo de mañana contempla 373 km de especial y 270 km de enlace