Los recientes focos de incendios forestales que se han desarrollado en diversas regiones del país han puesto en evidencia la importancia de la prevención y la protección del patrimonio familiar y empresarial. Ante este panorama, la Asociación Gremial de Corredores de Seguros de Chile (ACOSEG) llama a tomar medidas concretas para resguardar hogares, negocios y pertenencias, subrayando que contar con un seguro de incendio es una herramienta fundamental en esta labor.
Desde la gremial de Corredores, destacaron que, la prevención no se limita a evitar incendios, sino que también abarca estar preparados para enfrentar sus consecuencias. “Muchas familias no consideran la contratación de seguros porque perciben los desastres naturales como improbables o temen los costos de una póliza. Sin embargo, la realidad demuestra que enfrentar un siniestro sin cobertura puede tener un impacto financiero devastador, muy superior al costo de un seguro”, destaca María José Ibarra, directora de ACOSEG, quien además indicó que, “la protección de nuestro hogar no solo es un acto de responsabilidad personal, sino también una contribución al bienestar de nuestras comunidades. La prevención debe ser vista como una inversión y no como un gasto”.
Recomendaciones para quienes han sido afectados
Para quienes enfrentan las consecuencias de un incendio y cuentan con un Seguro, ACOSEG comparte las siguientes recomendaciones prácticas:
Contacte a su Corredor de Seguros: Si usted contrató su póliza por intermedio de un Corredor de Seguros, contáctese, pues es la persona idónea para asistirle en la denuncia y proceso de liquidación.
Comunicarse con la Aseguradora: Es fundamental ponerse en contacto con su compañía de seguros lo antes posible. Proporcione todos los detalles pertinentes sobre los daños sufridos y consulte sobre los documentos requeridos para el proceso de reclamación.
Recopilación de Documentación: Prepare la documentación completa que respalde la reclamación, incluyendo fotografías, facturas, boletas o presupuestos, estimaciones de reparación y cualquier otro documento relevante. Cuanta más información se proporcione, más eficiente será el proceso.
Atención y seguimiento: Manténgase en contacto regular con su Corredor de Seguros y/o la Cía. de Seguros, para obtener actualizaciones sobre el estado de su reclamación.
Coberturas: En el caso de un inmueble siniestrado, la cobertura es por daños totales o parciales ocasionados por el incendio, especialmente la estructura, pero hay algunas que también cubren los objetos que se encontraban en el interior del hogar (contenidos), eso depende de la póliza que haya sido contratada.
Actualice los montos en la renovación: Uno de los principales puntos a revisar todos los años es la valorización adecuada del activo a asegurar. Esto pues podrían haber habido construcciones nuevas, ampliaciones, revalorizaciones que modifiquen el monto asegurado. Cuidado con el infraseguro, cuando el valor atribuido al objeto garantizado en una póliza es inferior al que realmente tiene.
En caso que el Seguro esté relacionado a un crédito hipotecario, estas son las recomendaciones:
Copia de la póliza: Puede pedirla directamente a su banco, Corredor de seguros (en caso que lo haya hecho en forma externa) o buscarla en el portal de CMF “Conoce tu Seguro”.
Denunciar el siniestro: Debe hacerlo lo más pronto posible directamente con la institución financiera que le haya otorgado el crédito, con su Corredor de seguros o con la Cía. donde lo tiene vigente.
Documentos: Para poder proceder a los procesos de liquidación e indemnización, puede demostrar la pérdida a través de los siguientes documentos: Fotografías, facturas, cuentas, certificados de dominio y otros.
Es importante destacar que el proceso de cobrar su seguro de incendio – ya sea a través de su compañía aseguradora o si tiene un crédito hipotecario- puede tener una duración de hasta 45 días a partir del denuncio, lo que depende de la velocidad con que se reúnan los documentos solicitados por el liquidador, tras lo que se recibe un informe de liquidación, el que puede impugnarse por parte de asegurado al no estar de acuerdo; una vez aceptado, hay un plazo de 6 días para realizar la indemnización.
ACOSEG invita a la comunidad a reflexionar sobre la importancia de estar preparados ante desastres naturales. Contar con un seguro de incendio no solo es una medida de protección personal, sino también un acto de prevención que refuerza la estabilidad y resiliencia de nuestras comunidades. "Hoy más que nunca debemos valorar la prevención como el primer paso para cuidar lo que más importa: nuestras familias y nuestro patrimonio", concluyen desde la Asociación Gremial de Corredores de seguros de Chile.